La tapa es sin duda uno de los formatos más demandados entre los clientes que visitan los bares y restaurantes de nuestro país, y una de las principales embajadoras de la gastronomía española. Estos pequeños bocados se adaptan a muchos tipos de establecimiento y estilos de cocina. La tapa destaca además por su versatilidad, buena rentabilidad y fácil consumo, ya que aúna inmediatez y formato individual. En este post te daremos algunos trucos para que incorpores las tapas en tu oferta gastronómica con un éxito rotundo.

Adapta las tapas a tu negocio y a los hábitos de consumo de tus clientes.  Se trata de hacer en pequeño formato un producto que es marca de la casa y que, además, tiene el éxito garantizado porque ya son una referencia. Y, naturalmente, no puede faltar una representación de lo que más les gusta a tus clientes.

Prima siempre la calidad frente a cantidad. Esto supone huir de las cartas de tapas extremadamente largas donde el cliente se pierde y se diluye la identidad de tu cocina. Preparar una oferta coherente y que este alineada con la cocina de tu local.

Tapas de temporada. Combina las tapas frías y las calientes. Es recomendable tener ambas opciones durante todo el año, aunque las frías suelen ser las protagonistas de las estivales y las calientes las ideales para los meses más fríos. Siempre tiene que haber en tu carta tapas preparadas con los alimentos de temporada. Ten en cuenta que cocinar con comida de temporada da prestigio a tu negocio y genera confianza en tus clientes.

Tapas para todos.  No te olives de incluir tapas veganas, vegetarianas, sin gluten o sin lactosa. Que todo el mundo tenga donde elegir.

Incluye tapas innovadoras. Puedes optar por tapas gourmet, con un gran éxito de público en los últimos años. Las tapas gourmet adoptan ingredientes y métodos de elaboración de la alta cocina al pequeño formato, atraen a una clientela más gourmet o más deseosa de probar cosas nuevas. Por otro lado, las tapas fusión también están cada vez más de moda, especialmente entre la clientela más joven. Incorporan ingredientes y formatos de distintas cocinas (fusión peruana-japonesa o mexicana-china, entre otras combinaciones).

No te olvides de las tapas clásicas. Nadie renunciará a unos boquerones en vinagre o a unos calamares a la romana. Recuerda que los clientes siempre esperan encontrar alguna de estas opciones porque son muy sabrosas y forman parte del tapeo tradicional. Esta es una opción ideal para triunfar